Empanadillas de jamón y queso

Hoy les traigo una receta totalmente experimental, empanadillas de jamón y queso. 

Normalmente suelo hacer empanadillas de atún con tomate (ya otro día subiré la receta), pero esta semana me apeteció variar e intentar unas empanadillas de jamón y queso. Mi consejo es que las hagas un día que tengas tiempo y te apetezca cocinar porque puedes tardar un poquito en hacerlas todas.

Me encanta el sabor del queso, asi que he escogido una bolsa de quesos en daditos que suele utilizarse para la elaboración de ensaladas porque es un queso un poco más sabroso que por ejemplo el queso plato.  También he preferido el jamón serrano al jamón cocido por su intenso sabor.

Ingredientes (para 16 empanadillas):

•  100 g. de jamón serrano cortado en dados
• 150 g. de queso (el que más nos guste)
• Una bolsita de obleas (suelen traer 16 obleas)
• Perejil (opcional)
• Una yema de huevo (para sellar las empanadillas)
• Harina (una pizca para que no se peguen las empanadillas) 

Con el paso del tiempo se darán cuenta que hago recetas básicamente para no tirar productos que me hayan sobrado de otras. En este caso, además del queso, le he añadido lo que me quedaba de un paquete de queso en polvo para pasta. 

Lo primero es coger la tabla de cortar para no ensuciar la encimera y espolvorear un poco de harina para que no se peguen a la superficie. También deberíamos espolvorear el plato donde las vayamos poniendo hasta que las friamos.

Necesitaríamos un rodillo para estirarlas un poquito. Si te pasa como en mi caso, que no tenemos rodillos de masa, podemos utilizar un rollo de papel film, espolvoreado de harina también, y cuando terminemos solo tendremos que tirar el plástico que ha estado en contacto con la comida.

Hacer empanadillas es muy sencillo, una vez que ya tienes todo espolvoreado de harina para que no se pegue a ningún sitio, solo tienes que amasar mínimamente, echar los ingredientes, empapar con una brocha o, en caso de que no tengamos brocha, utilizar un dedo limpio para mojar los bordes de la oblea con la yema de huevo. Entonces solo tienes que cerrarla por la mitad, y con la ayuda de un tenedor, ir presionando el borde, que gracias a la yema, se mantendrá pegado.

Cuando ya solo te queden cuatro empanadillas por hacer, puedes ir calentando el aceite. Las empanadillas hay que hacerlas con el fuego altito, y con cuidado porque podría salpicar. Este es mi resultado:

En mi caso me sobró un poco de jamón, y como ya dije que yo no desperdicio nada, esta noche cenaré tortilla francesa de jamón (con la clara del huevo que utilizamos para sellar las empanadillas).